Los primos melómanos
Melómano: "Persona fanática de la música" (R.A.E.)
Hay familias de abogados, médicos, arquitectos, ingenieros o artistas. La mía es de melómanos, aunque eso no sea una profesión sino una condición humana. El hecho es que hasta hoy no conozco "la oveja negra" dentro del clan, y menos por el lado materno, donde el árbol genealógico es frondoso de primos hermanos, segundos, terceros, etc. Si existiera ese familiar anti-música, seguro ha vivido verdaderas sesiones de torturas por años.
Para no cometer un error, lo dejamos en que la mayoría compartimos esa condición melómana. Tal vez llevamos un gen con predisposición a la adicción a melodías y ritmos. Lo cierto es que todos los primos desde bebés recibimos fuertes dosis de discos en navidad, fin de año, cumpleaños, aniversarios, bautizos, comuniones, etc., etc., etc. En la infancia nuestra única carencia fue el silencio, por fortuna.
En cualquier casa de los primos los discos giraban sin fin. Muchas fueron la agujas de tocadiscos consumidas, y alguna que otra corneta (altavoz) reventada. Los géneros musicales variaban según el momento de la reunión, aunque siempre había sets bailables que iban dede la salsa hasta el disco music. Escuchabas de todo, incluso cosas que hoy no podría confesar. Pero ese es el riesgo de convivir en un ambiente melómano, y más cuando eres un imberbe excluido del equipo de sonido.
A continuación van a escuchar algunos de esos temas que seguramente están adheridos en la memoria colectiva de la mayoría de los primos, y a quienes quiero agradecer en este 5to. Aniversario de Letrastereo. Ellos han contribuido a disfrutar de este idioma universal y que sienta el placer de compartir esas sensaciones que uno vive con ella, la música.
Para no cometer un error, lo dejamos en que la mayoría compartimos esa condición melómana. Tal vez llevamos un gen con predisposición a la adicción a melodías y ritmos. Lo cierto es que todos los primos desde bebés recibimos fuertes dosis de discos en navidad, fin de año, cumpleaños, aniversarios, bautizos, comuniones, etc., etc., etc. En la infancia nuestra única carencia fue el silencio, por fortuna.
En cualquier casa de los primos los discos giraban sin fin. Muchas fueron la agujas de tocadiscos consumidas, y alguna que otra corneta (altavoz) reventada. Los géneros musicales variaban según el momento de la reunión, aunque siempre había sets bailables que iban dede la salsa hasta el disco music. Escuchabas de todo, incluso cosas que hoy no podría confesar. Pero ese es el riesgo de convivir en un ambiente melómano, y más cuando eres un imberbe excluido del equipo de sonido.
A continuación van a escuchar algunos de esos temas que seguramente están adheridos en la memoria colectiva de la mayoría de los primos, y a quienes quiero agradecer en este 5to. Aniversario de Letrastereo. Ellos han contribuido a disfrutar de este idioma universal y que sienta el placer de compartir esas sensaciones que uno vive con ella, la música.
Esta adaptación de Willie Colón del tema de Chico Buarque sonó con fuerza en Latinoamérica y en las casas de los primos a partir de 1981. "Oh que será" pertenece el LP Fantasma reconocido hoy en día como un clásico. Tuve la fortuna de escuchar este tema por primera vez en vivo en la versión que acaban de ver, perteneciente al concierto "50 aniversario de Amnistía Internacional" en La Carlota, Caracas, año 1998.
Del mismo concierto seleccioné "Plástico" un tema con una lírica muy potente y realista, pero que en esos años de infancia el gancho fue su intro disco music y cambio de ritmo a la salsa de calle. Pertenece a álbum Siembra de Rubén y Willie, el más vendido en la historia de la salsa. Este disco de 1978 dio vuelta y vuelta en los tocadiscos de la familia también con estas inolvidables canciones: "Pedro Navaja", "Buscando Guayaba", "María Lionza", "Siembra", "Ojos" y "Dime".
Para cerrar esta entrega tributo a los primos melómanos voy a completar un triángulo muy significativo para la salsa de esos años con el señor Héctor Lavoe. El mismo Rubén compuso y regaló al boricua la siguiente canción en agradecimiento por su influencia como cantante.
Con los años el rock y otros estilos ocuparon la colección musical personal, aunque la salsa de calidad que sonaba en casa de los primos irá conmigo a donde sea.
Gracias primos melómanos.
Adrián Naya
Advertencia: Un melómano no necesita excusas porque siempre existe una "razón" para disfrutar con la música.
Hijo querido qué puedo comentar, tengo nudos en mi garganta y dedos, para expresar la mezcla de sensaciones y emociones me producen esta entrega de letrastereo, nostalgia, plenitud y una gratitud por los momentos vividos en familia.
ResponderBorrarMil gracias. Dios te bendiga y bendiga nuestra melomania.